El día de
la Solemnidad del Sagrado Corazón ha tenido lugar en la parroquia de
Nuestra Señora de África el comienzo de las Vigilias de oración por las
Vocaciones en la Vicaría VI. La vocación nace en el corazón de cada persona, se
cultiva con la oración al contemplar el amor de Jesús por la humanidad y al
escuchar su llamada a seguirle. Hemos orado a Cristo Jesús con la advocación
del Sagrado Corazón. Adorar el Corazón de Cristo es adorar al mismo Dios. Su
amor misericordioso, cercano de los marginados, los pecadores, los que sufren y
los pobres, suscita el deseo de ir en pos de él. Su amor ardiente por el Padre
y por todo el género humano, por quien se ofreció, continúa mostrándonos amor a
partir del tabernáculo de donde nos llama a Él, en donde podemos convivir con
la persona amada participando en la verdadera comida y en la verdadera bebida.
Es así, que en la vigilia hemos escuchado cómo Jesús sigue llamando
para consagrarle toda la vida por amor al Padre y a la humanidad en las
diferentes vocaciones: al sacerdocio, a la vida religiosa y misionera, imitando
así, su estilo de vida.
Dos testimonios
vocacionales nos han permitido tocar de cerca la llamada del Señor: uno de
Roberto González Tapia, sacerdote diocesano, ordenado recientemente y que
desarrolla su labor pastoral en la Parroquia Santa Maravillas de Jesús de esta
Vicaría. Con sencillez nos ha hablado de
cómo percibe su vida dentro del amor y la misericordia divina. En el camino de
Santiago vio una parroquia que estaba acompañada por dos sacerdotes y comparaba
con la suya que no tenía un sacerdote que los acompañaba. Así recibía su
llamada y expresaba a la edad de 15 años su deseo de responder a la llamada al
sacerdocio entrando al Seminario. 
El otro testimonio
ha sido de la hna. Doris Cristina Gutiérrez Rodríguez, clarisa franciscana, del
Convento de General Ricardos. Ella es
contemplativa y, por ello, ha sido un don valioso el poder escuchar el relato
de su vocación. Originaria de El Salvador,
a los trece años sintió por primera vez la llamada a consagrarse con las
benedictinas en España ya que no había un convento de clausura en su pueblo.
Pero ante la negativa, debido a su joven edad, esperaría hasta los dieciocho,
pero para hacerse clarisa franciscana. Con las Clarisas Franciscanas había
entrado en contacto desde los dieciséis, ellas, en ese momento, tenían pocas
vocaciones y por ello las Benedictinas les habían propuesto que cultivasen el
diálogo con la ahora hermana Doris. En todo ello, nos decía ella, ha
experimentado siempre el amor de Dios y ha visto cómo él nos va marcando el
camino. Ahora lo vive con el carisma clariano-franciscano en fraternidad y
contemplación. Se siente muy unida a Dios, a su comunidad y a toda la
humanidad. Nos ha narrado parte de la vida contemplativa, descrito el sentido
de los votos de pobreza, castidad y obediencia, haciéndonos vivir la alegría de
su vocación contemplativa.
La vigilia
de oración ha sido un momento muy valioso para descubrir cómo nos dicen las
acciones de la Misión-Madrid
que: “Dentro de la misión entre los
jóvenes deberíamos potenciar la pastoral vocacional, tanto al ministerio
sacerdotal como a la vida consagrada”. Nos hemos dado cita para las próximas
vigilias, la misionera el 1 de octubre, fiesta de Sta. Teresita del niño Jesús,
patrona de las misiones en el Convento de las Clarisas Franciscanas y la de
Vocaciones el 7 de noviembre en la parroquia de la Resurrección. Muchas gracias
a todos los asistentes por su oración y deseo de colaborar con la promoción de
vocaciones en la Iglesia.
Oración por las vocaciones:
Señor, te rogamos por nuestros hermanos y hermanas
que han respondido sí a tu llamada al sacerdocio,
a la vida consagrada y a la misión.
Haz que sus existencias se renueven de día en día,
y se hagan evangelios vivientes.
¡Señor misericordioso y santo,
sigue enviando nuevos operarios a la mies de tu Reino!
Ayuda a los que has llamado a seguirte en este tiempo
nuestro;
haz que, contemplando tu rostro, respondan con alegría
a la maravillosa misión que les has confiado
por el bien de tu Pueblo y el de todos los pueblos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
(Oración del Papa Emérito Benedicto XVI con ocasión de la Jornada Mundial
de Oración por las Vocaciones 2013).
Las Vigilias de oración por las Vocaciones son organizadas por las Coordinaciones de Vocaciones y Pastoral Misionera de la Vicaría VI, el grupo APOR (Apostolado de la Oración) y las Clarisas Franciscanas de General Ricardos
Mil gracias a los organizadores de este evento por habernos preparado, con tanto esmero y cariño, un rato de oración tan especial que nos ha hecho sentir la alegría de ser cristianos, hijos de Dios amados en Cristo y el orgullo de poder amar y servir a Dios, a su Iglesia y a todos quienes nos rodean. Fueron conmovedores los dos testimonios, muy diferentes pero con el mismo mensaje de una Fe vivida y una vida entregada vocacionalmente. ¡Bravo!
ResponderEliminarMuchas gracias a los organizadores del eventos por habernos preparado, con tanto esmero y cariño, un rato tan especial de oracion, que nos ha hecho sentir de nuevo la alegría de ser cristianos, hijos de Dios en el Corazon de su Hijo Jesús y que podemos amar y servir a Dios, a su Iglesia y a quienes nos rodean, cada día mas y mejor. Los dos testimonios fueron conmovedores, muy diferentes pero con el mismo mensaje de fondo, una Fe vivida en una vida ofrecida y entregada vocacionalmente. ¡Bravo!
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