La Vigilia de Oración por las
Vocaciones marcada con el lema “Que bueno caminar contigo” ha tenido en la
parroquia de Sto. Domingo de Guzmán de la Vicaría VIª el jueves 30 de abril
2015.
En este año del V Centenario del
nacimiento de Sta. Teresa, hemos pedido por la Iglesia, que precisa tanto de
vocaciones para proclamar, anunciar y formar en la verdad del Evangelio, como
de vocaciones que, con sus vidas, sean signos visibles de la alegría y
fecundidad del reino de Dios. Por eso, pedimos al Padre que siga fortaleciendo
la fe y la entrega de los consagrados, al servicio del Reino, en la
multiplicidad de los carismas.
Después de la Eucaristía que se ha
ofrecido con la misma intención hemos escuchado dos testimonio de dos
vocaciones religiosas, un sacerdote verbita y una religiosa.
Mirek que es capellán de la
comunidad polaca, originario de Polonia y religioso del Verbo Divino, nos ha narrado
como su vocación nace en el seno de una familia cristiana y durante la época vivida de la Polonia cuando
era un país comunista. Sus primeros
pasos los realizó en una parroquia cercana a su casa y atendida por los Misioneros
del Verbo Divino. Una vez sacerdote le enviaron a Argentina y después
de un tiempo en Polonia le pidieron el servicio de la capellanía polaca en
Madrid. Él agradece al Señor por su vocación, por haberlo llamado y no se
arrepiente de haberle dicho que sí.
Irene, también nacida en Polonia,
es religiosa de las Hijas del Amor Misericordioso, comunidad que nace en Sevilla en
1983. Su carisma es el ejercicio del amor misericordioso de los que buscan a
Dios y a quienes ofrecen los Ejercicios Espirituales de San Ignacio. Su tarea es por lo tanto de acompañamiento
espiritual, colaborar con parroquias y la formación de catequistas. Irene nos
habló también del seno cristiano de su familia. Nos ha contado sus diferentes
síes en diversas edades: 9 años, 15, años y el definitivo una vez terminados
sus estudios universitarios. Ella, llegó a España debido a un trabajo y al
conocer a las religiosas encontró mucha paz y alegría. Algo que buscaba y que
después de haber vivido los Ejercicios Espirituales ha discernido como una
vocación consagrada. Ella ve la gracia de Dios y de manera especial en el Amor
Misericordioso que vive en su comunidad.
Los dos nos han comunicado alegría,
y a la vez hemos podido agradecer por Javier, un joven de la parroquia que
actualmente se encuentra en el seminario y se prepara para ser sacerdote. La
compañía y participación de tantos hermanos y hermanas rezando por las
vocaciones nos ha dado fuerzas y entusiasmado en esta tarea que creemos
esencial en el seno de las comunidades: pedir por las vocaciones.
La coordinación de Vocaciones y de
Misiones de la Vicaría VI, unidas a la Clarisas Franciscanas de General Ricardos siguen urgiendo
a un despertar en la vocación que Dios nos hace.
Gracias a cada uno, al coro, a los religiosos que han dado su testimonio, a la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, a Miguel, el párroco, a David y a Miguel Armando, todos han colaborado para que la Vigilia de oración tenga lugar y siga como llama, manteniendo ardiente la oración por las vocaciones.
Rolando Ruiz Durán sx
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