25/10/14

El ébola en el día al día en la vida de Luis Pérez Hernández

Luis Pérez en su primer período en
 Siera Leona
El sacerdote y misionero javeriano Luis Pérez lleva ocho meses en Sierra Leona. Antes había vivido allí 15 años, dedicando su vida a intentar ayudar a los más necesitados en uno de los países más pobres del mundo. El Padre Luis sufrió un cruel secuestro durante la guerra que asoló el país y diezmó su población por parte de los sanguinarios rebeldes del RUF, tristemente conocidos por sus sistemas de guerrilla aniquiladora y amputaciones indiscriminadas a niños, mujeres y hombres que no fueran de su agrado. Daba igual el motivo.
Hoy, destinado en la misión javeriana de Makeni, en el distrito de Bombali, una de las poblaciones más afectadas del mundo por el ébola, Luis Pérez se arma con su teléfono móvil y aprovecha las nuevas tecnologías para emitir sus vídeos a través de wouzee, la plataforma de vídeos en directo y streaming creada en España. No necesita más.
Luis Pérez ahora en Sierra Leona
A sus 71 años ha decidido contar al mundo la situación de precariedad absoluta en que están viviendo en Sierra Leona. Nula prevención, escasa e ineficiente información, y un inexistente sistema sanitario que permita a la población enfrentarse a esta enfermedad.
Luis recorre con mucha prudencia en esta primera entrega las casas que se encuentran en cuarentena, cuenta el aislamiento que sufren, y describe algunas de las formas de contagio entre la población y las muertes que se han producido. No tienen quien les informe y tampoco quien les escuche. Mucho menos quien les cure. Este misionero ha puesto todo su valor y humanidad al servicio del mundo para poder hacer llegar un mensaje de alerta a la comunidad internacional. Con la esperanza de que sus imágenes y relatos sirvan para concienciar y acelerar los procesos de ayuda que puedan beneficiar a los habitantes de Sierra Leona.
Se arriesga en su compromiso a cruzar líneas peligrosas incluso para su salud, mermada en estos días por un fuerte ataque de malaria que le ha tenido en la cama prácticamente inmóvil.
A las alarmantes cifras oficiales de personas contagiadas y muertas por culpa del ébola, el Padre Luis se atreve a cuestionar esos datos y considera que los enfermos y muertos son más del doble de los que la población mundial conoce.
A lo largo de estos días, y con la frecuencia que la tecnología se lo permita, este javeriano y la cámara de su teléfono tratarán de desentrañar y mostrar una realidad muy diferente a la que vivimos en los países desarrollados alrededor de esta enfermedad. El drama no deja de ser el mismo en España, Estados Unidos o Sierra Leona, pero las condiciones de vida, las soluciones médicas, las fórmulas de información y prevención son tan radicalmente distintas que se hace incomprensible que podamos estar hablando de la misma enfermedad. "Hombre rico-hombre pobre", esta es la cuestión.

2 comentarios :

  1. Queremos agradecer a los misioneros que no abandonan a los afectados por el ebola. Como les consuelan en su dolor y les ayudan a tener esperanza ante tanta desgracia.

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  2. Mucho ánimo y gracias por vuestra entrega y generosidad

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